¿Es la caída precipitada de este año en el mercado de criptomonedas el final que muchos predijeron? ¿O es solo uno de tantos ciclos a los que el sector ya nos tiene acostumbrados? 

Hace un año los inversores describían a bitcoin como el futuro del dinero, y a Ethereum como la herramienta de desarrollo más importante del mundo. Los tokens no fungibles (NFT) estaban explotando. Coinbase cotizaba a un nivel récord y el Miami Heat de la NBA jugaba su primera temporada completa en el recién renombrado FTX Arena.

Resulta que este fue el pico de la criptografía. En los 12 meses transcurridos desde que bitcoin cotizaba por encima de los $68,000, las dos monedas digitales más grandes han perdido tres cuartas partes de su valor, desmoronándose junto con las acciones tecnológicas más riesgosas. La industria, una vez valorada en alrededor de $3 billones, ahora vale alrededor de $900 mil millones.

En lugar de actuar como una cobertura contra la inflación, el mundo cripto ha pasado a ser otro activo especulativo que explota cuando los fanáticos están detrás de él y se derrumba cuando el entusiasmo se derrite y los inversores se asustan.

¿Qué es criptoinvierno?

El término criptoinvierno está relacionado con las oscilaciones y el volumen de negociación de los criptoactivos, en particular, las criptomonedas. Así, el paso inicial para entenderlo es conocer la situación de los activos en cada periodo.

En 2022, especialmente en la primera mitad, el criptomercado mostró un movimiento a la baja. Este dato es importante, dado que en 2021, el bitcoin, el criptoactivo con mayor volumen negociado, tuvo su máximo histórico. El criptoinvierno hace referencia a estas bajas, pero también a la quiebra de proyectos y empresas importantes del sector. 

Aquí tres casos que ayudan a entenderlo: 

FTX

FTX, uno de los exchanges de criptomonedas más grandes del mundo, llegó a valer alrededor de $32 mil millones este año. El crecimiento de la compañía elevó al joven Sam Bankman-Fried al rango de dos de los multimillonarios más grandes del mundo, un estatus que perdió rápidamente.

En un abrir y cerrar de ojos, FTX se desplomó de esa valoración a la bancarrota, cuando la liquidez se agotó los clientes exigieron retiros y el exchange rival Binance rompió su acuerdo no vinculante para comprar la compañía. El fundador de FTX admitió que «se equivocó» y renunció como director ejecutivo, dejando a miles de inversores sin manera de recuperar su dinero.

Three Arrows Capital

Un tribunal de las Islas Vírgenes Británicas ordenó la liquidación de Three Arrows Capital, un destacado fondo de cobertura de criptomonedas que incumplió un préstamo por valor de más de $670 millones. El 27 de junio se redactó un escrito judicial solicitando la liquidación de la empresa.

Fundado por Kyle Davis y Su Zhu en 2012, Three Arrows Capital se había convertido en uno de los mayores fondos de cobertura de criptomonedas. Aun así, se vio afectado por el repentino colapso del proyecto Terra en mayo.

LUNA

El protocolo Terra y sus criptomonedas LUNA y UST estaban entre las más grandes del mundo, y registraron un precio récord antes de desplomarse y ver su valor reducido a cero. La emisión de tokens LUNA está vinculada al valor de la UST, lo que significa que cuanto menor sea la UST por debajo de US$1, más tokens LUNA deben venderse para respaldar a esta moneda, lo que significa la paridad de la moneda con el dólar.

Este proyecto fracasó debido a que, cuanto más tokens LUNA se vendían en el mercado, más bajaba su precio. Cuanto más caía el precio de LUNA, más tokens debían emitirse y venderse para comprar UST a fin de mantener la paridad.

Esta secuencia de eventos resultó en un efecto dominó con la emisión descontrolada e ilimitada de nuevos tokens LUNA, lo que provocó que la criptomoneda colapsara en espiral. Terra, la empresa detrás del proyecto, trató de evitar que esta situación se intensificara comprando algunas altcoins para dejarlos en reserva, pero estas reservas se agotaron en solo dos días y terminaron por no evitar la devaluación y el colapso final de LUNA.

Todos estos ejemplos nos demuestran que si bien, las criptomonedas parecen ser una alternativa de inversión, debido a su gran volatilidad y riesgo es indispensable su análisis e investigación, ya que no proveen seguridad o respaldo a sus usuarios. 

¿Es posible obtener ingresos de las criptomonedas sin estar expuestos a su volatilidad?

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí