Previo a la pandemia la industria avícola en Centroamérica se encontraba en crecimiento, pero con la llegada del covid-19 se vio fuertemente afectada. Sin embargo, existen casos de éxito en los que la reinvención ha sido un elemento fundamental para hacer frente a la dura situación, con oportunidades de rápida recuperación y crecimiento a futuro.

Antes de la pandemia, en 2019 la producción de pollo en Centroamérica y Panamá superaba un millón de toneladas métricas, lo que representó un incremento de 2.18% respecto a 2018, de acuerdo con Luis Valle, de la Asociación Latinoamericana de Avicultura -ALA-.

En la región, el principal productor avícola es Guatemala, que aporta cerca del 22% del total, seguido por Panamá (20%) y Honduras (19%).

“La industria avícola regional ha crecido a un ritmo del 16.9% en el quinquenio 2015-2019, una dinámica que supera al total de América Latina y el Caribe, que avanzó en 3.84% en el mismo período” Luis Valle, ALA.

Una de las razones por las que se explica el crecimiento durante el último quinquenio, es que Centroamérica aún se encuentra por debajo del consumo per cápita promedio de Latinoamérica (210 unidades de huevos anuales y cerca de 40 kilos de pollo). Esto también ofrece un escenario de crecimiento a futuro, con fuertes oportunidades de recuperación tras la pandemia.

 

COVID-19 y la producción avícola

Como consecuencia de la pandemia, se espera que la industria avícola en Centroamérica experimente una contracción de aproximadamente el 15%. Un escenario difícil, pero no del todo desalentador, si se toma en cuenta que en los momentos más críticos durante el confinamiento, la contracción del mercado llegó hasta un 40%.

«Sí nos hemos visto afectados, dificultades de supplay, con los toque de queda, el cierre de restaurantes, hubo merma en las ventas, sobre todo en abril, mayo y junio», explica en entrevista con Avinews, José Gregorio Baquero, CEO de CMI Alimentos, una de los principales productores de la región centroamericana. 

Y es que el canal horeca (hoteles, restaurantes y cafeterías) o full service, ha sido de los más golpeados con las medidas de confinamiento y las restricciones para intentar contener la ola de contagios. Con el cierre de restaurantes, el consumo de carnes en general ha disminuido y, aunque el pollo es el que menos se ha visto afectado, sí ha sentido el golpe.

Pero el pollo es una de las carnes más apreciadas del mundo, con una tendencia a crecer con o sin restricciones y alta demanda de forma permanente, explica el Dr. Paul Aho, economías avícola, al hablar de la industria avícola post covid-19.

Valle ha expresado optimismo para que la recuperación se empiece a consolidar en el primer trimestre de 2021. Esto porque reconoce que la industria cuenta con una determinante fortaleza, y es que la bioseguridad del producto ya era una parte fundamental de la gestión avícola.

Por su parte, Aho señala que esta recuperación también implicará la reinvención de la industria, porque la pandemia vino a señalar la importancia de procesos digitalizados, trazabilidad del producto y automatización. En otras palabras, se requerirá una transformación tecnológica acelerada.  Asegura que, tras el coronavirus los productores avícolas deberán pensar en sí mismos más como empresas de internet, que como simples empresas avícolas para lograr el éxito.

 

Caso CMI: experiencia, preparación y la agilidad para la reinvención como insumos para enfrentar la pandemia

Recientemente, José Gregorio Baquero, CEO de CMI Alimentos (agrupación de negocios de Corporación Multi Inversiones, que se perfila como uno de los más grandes líderes centroamericanos en la industria alimentaria) en entrevista con Avinews compartió cómo la corporación no solo está sobreviviendo a la pandemia, sino que está prosperando. 

Como CEO afirma que su trabajo es anticiparse a los tantos cambios de la industria, para dar la mejor propuesta de valor a sus clientes. 

Uno de los grandes aciertos en toda la crisis ha sido su enfoque en buscar el desarrollo sostenible de microempresarios. Este es el caso de su concepto de «La casa del pollo», que básicamente es un expendio de pollo beneficiado presente en varias de las geografías en las que la corporación está presente, donde se aporta un negocio para que terceros puedan desarrollarse sosteniblemente a ellos mismos y sus familias, mientras contribuyen al desarrollo del país y participan de forma muy activa en la cadena. 

Al mismo tiempo señala que, a raíz de la crisis actual, han tenido una estrategia digital que es de primer mundo, al punto que la revista Technomic los posicionó en el segundo lugar de todas las industrias de restaurantes en Estados Unidos como el número dos, en la categoría de uso de tecnología durante la pandemia. 

Afirma que, aún en pandemia y crisis, CMI Alimentos está superando su plan, con estrategias muy agresivas de crecimiento y planes de entrar a nuevos mercados. 

Una de las razones para su éxito, radica en su capacidad de preparación y reacción. Tradicionalmente cuentan con las medidas fitosanitarias más estrictas, pero este año han redoblado todas ellas. 

“El covid no nos agarró desprevenidos, ya el años pasado se hizo un protocolo de crisis, no teníamos una bola de cristal, pero nos anticipamos para saber cómo actuar, qué hacer, qué tipos de comités formar y, muy a principios de año, antes que explotara la crisis, empezamos a tomar medidas” – José Gregorio Baquero, CEO de CMI Alimentos. 

Pero no solo implementaron esos protocolos en sus más de 1400 sedes, con sus más de 41500 colaboradores. Además, pusieron los protocolos a disposición pública, para que el resto de la industria se pudiera beneficiar con lo que ellos ya estaban haciendo. 

Esta capacidad previsora, permitió que en marzo ya contaran con un plan que mitigó la crisis en el flujo de caja del negocio, que se traduce en un importante repunte en los últimos meses y semanas (aunque también asegura que esto no ha llegado a todas las líneas de negocio, ni a todos los países), que les permite ser optimistas en que pronto llegarán al 100% del movimiento. 

Asegura que en los últimos 4 meses la agrupación de negocios ha logrado avanzar lo que tomaría 2 o 3 años hacer en otras condiciones, al reenfocar las inversiones hacia temas digitales y cambios de la llegada al mercado. 

Las herramientas digitales no han sido pensadas solo para los consumidores, sino para clientes y para vendedores, así como en materia de televenta. 

José Gregorio Baquero resume su caso de éxito en tres importantes ramas: innovación, inversión y hacer las cosas diferentes.

 

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