Cuando ya es un hábito tener una rutina diaria con base en nuestro trabajo, aprender a delegar para pasarlo a otros puede resultar complicado; incluso si te está causando estrés o está provocando que se te acumulen las tareas.
¿Te ha pasado?, si es tu caso, es importante que sepas lo imparte que es lograr dar este paso, no solo por el bien del proyecto, sino por tu propia salud mental y física. Siempre debes tener en cuenta que si no rindes al 100%, el proyecto tampoco lo reflejará, así que es aquí donde el trabajo en equipo toma un papel sumamente importante donde tendrás que aprender a confiar en alguien más.
Sabemos que no es tan sencillo como se lee, sin embargo hoy te daremos algunos consejos que te ayudarán a llevar de forma más ligera entre proceso.
Busca dentro de ti. Reconoce las causas por las que no consigues llegar a delegar, una vez que lo tengas identificado sabrás en qué comenzar a trabajar. Algunos ejemplos de los miedos que podrías detectar son:
- Perder el tiempo: A veces puedes llegar a pensar que es más costoso delegar la tarea que hacerla nosotros mismos.
- Confianza: La incertidumbre puede aparecer al preguntarte si la persona a la que vas a delegar la tarea está preparada para hacerla.
Enlista tus tareas. Procura visualizar claramente todas las tareas que realizas de forma diaria, semanal y mensual. Una vez con esta información elige aquellas que son esenciales para ti, así como aquellas que puedes delegar evaluando las capacidades que requiere cada una para llevarla a cabo.
Selecciona nuevos responsables. Rodearte de personas con motivación y competentes es fundamental para que te sea más fácil delegar, de tal forma que sentirás menos incertidumbre si confías en que cuenta con habilidades y capacidades para hacer frente a la tarea.
Supervisión. No veas este punto como una pérdida de tiempo, piensa que es una inversión, sobre todo porque como todo buen líder, tendrás que presentarle el proyecto, explicar el proceso y la forma de asumir sus funciones. Prohibido comparar el cómo lo hacías tú Vs. la forma de trabajo de tu equipo.
Aprender a delegar indudablemente requerirá confianza y una mejor autogestión, así que te invito a reflexionar sobre las habilidades de tu equipo de trabajo, quizá haya personas con habilidades que podrías estar limitando, incluyendo aquellas que tú también posees y que a falta de tiempo estas mermando.
A mi me cuenta mucho esto, es verdad q sientes q los demás lo harán mal y trabajarás el doble.
Pero se que es importante